Arte Sella es una manifestación internacional de arte contemporáneo, creada en 1986, que se desarrolla al aire libre en el Valle de Sella de los Alpes italianos. Este evento no se califica sólo como una exposición de obras de arte, sino que también busca fomentar el proceso creativo, la relación con la naturaleza y la inspiración artística dentro del marco de promoción del paisaje del Valle.
Las obras, generalmente escultóricas, están realizadas mayoritariamente con materiales naturales como piedras, hojas, ramas y troncos, que quedan expuestos a los procesos de evolución y degradación natural. En Arte Sella se desarrolla un recorrido entre las obras y los elementos del paisaje más singulares del Valle a través de una pista forestal, en la que el visitante puede entrar en contacto con diferentes tipos de bosques, rocas y árboles monumentales mientras avanza acompañado por las obras de destacados artistas del movimiento Arte y Naturaleza como Cornelia Konrads, Nils Udo, François Lelong, Thierry Teneul, Alois Steger, Giuliano Mauri, entre otros.
Diferenciamos este tipo de corriente del Land Art y los Earthworks de artistas como Robert Smithson, Michael Heizer o Christo que actuaron en entornos de gran belleza tallando, transportando o envolviendo la tierra según su interpretación del entorno, que finalmente dieron lugar a alteraciones ecológicas en el entorno.
Examinando algunas de las obras presentes en el recorrido descubrimos que las técnicas artesanales de trenzado de ramas, para los huertos de los monasterios, o la acumulación de troncos al lado de las pistas forestales se reinterpretan para sorprender y crear espacios artísticos dentro del bosque. Además se crean interacciones con otros elementos como el musgo, el agua o los insectos, para crear microhábitats nuevos y poner en evidencia algunos procesos naturales.
Es muy importante dónde se ubica la obra dentro del recorrido; hay una búsqueda de puntos focales, de perspectivas y de interacción con el visitante a través de obras que potencian sentidos como el oído o el tacto. De esta forma, la obra de arte suscita una sensibilidad hacia el paisaje y le descubre al visitante algunas de sus características.
Así, Arte Sella nos puede enseñar el poder artístico de los materiales naturales, la importancia del genius loci para la inspiración y también a pensar en el paisaje como un espacio cuadrimensional, donde el tiempo es una variable muy importante en el proceso creativo.
Fuera de un museo al aire libre, las obras de Arte y Naturaleza, en un entorno natural o artificial, pueden ser utilizadas para poner el acento sobre ejes visuales, evidenciar características propias del entorno o las interacciones entre la vegetación, el hombre y los elementos naturales. También pueden ayudarnos a poner a escala un espacio, e infundir armonía, o a exagerarla para crear una sensación de estupor y maravilla.
Os animamos a profundizar y ver las posibilidades que se pueden crear con los restos orgánicos del mantenimiento de un jardín o con las ramas, tallos y flores de algunas de las plantas cultivadas en el Vivero.
Imágenes: M. Galante / artesella.it